MEDIOS DE ALMACENAMIENTO EN LA NUBE
El almacenamiento en la nube consiste en extraer, agrupar y compartir recursos de almacenamiento a través de Internet. Esto es posible gracias a las nubes, las cuales son entornos de TI que habilitan el cloud computing, es decir, la ejecución de las cargas de trabajo dentro de ellas. Para acceder a este servicio, no es necesario contar con una conexión Intranet (lo que se conoce como almacenamiento conectado en red) ni con una conexión directa al hardware de almacenamiento (lo que se denomina almacenamiento de conexión directa).
Existen tres tipos de nubes para el almacenamiento: pública, privada e híbrida. También hay tres maneras de dar forma a este almacenamiento: en bloques, archivos u objetos. Cada formato tiene ventajas y desventajas, por ejemplo: los bloques son más rápidos, los archivos se pueden comprender con mayor facilidad y los objetos funcionan mejor con las cargas de trabajo rápidas. Sin embargo, algunos productos de almacenamiento en la nube definido por software combinan estos tres formatos en una solución unificada y fácil de implementar.
Los datos se pueden utilizar como memoria a corto plazo, o se pueden archivar como memoria a largo plazo. La memoria de acceso aleatorio (RAM) es la encargada de procesar la memoria a corto plazo. Allí se procesan y se registran todas las solicitudes y las acciones durante el tiempo en que una computadora procesa cálculos específicos (conocidos como tareas). Una vez que se realizan todos los cálculos, se almacenan los datos como memoria a largo plazo en distintos volúmenes de almacenamiento, y algunos de ellos pueden ser nubes.
En la base de cada volumen, se encuentran los recursos de almacenamiento extraídos del hardware físico. La tecnología de virtualización es un tipo de extracción que puede abarcar una docena de servidores distintos (básicos o propietarios) y separar el espacio de almacenamiento de cada uno de ellos. Este espacio virtual se puede agrupar en un lago de datos, al cual los usuarios acceden como un solo repositorio. Si el lago no está conectado a Internet, significa que creó un almacenamiento en la nube
Almacenamiento en bloques
En el almacenamiento en bloques, se divide un volumen de almacenamiento (como un nodo de almacenamiento en la nube) en instancias individuales conocidas como bloques. Es un sistema rápido y de baja latencia, ideal para las cargas de trabajo de alto rendimiento.
Almacenamiento en objetos
El almacenamiento de objetos implica conectar una unidad de datos con identificadores únicos, conocidos como metadatos. Debido a que los objetos no están comprimidos ni cifrados, se puede acceder a ellos rápidamente a gran escala. Por eso son ideales para las aplicaciones nativas de la nube.
Almacenamiento de archivos
El almacenamiento de archivos es la tecnología dominante que se utiliza en los sistemas NAS, y ahí se organizan y se representan los datos para los usuarios. Su estructura jerárquica nos permite explorar los datos desde el comienzo hasta el final con facilidad, pero incrementa el tiempo de procesamiento.
Almacenamiento en la nube pública
Consiste en almacenar datos entre conjuntos de recursos que se extraen del hardware ajeno al usuario final. El hecho de que las empresas no sean dueñas de los sistemas que almacenan y gestionan sus datos implica ciertos riesgos, así que muchas de ellas usan contenedores para trasladar las cargas de trabajo y las aplicaciones entre los entornos de nube pública. Las soluciones de almacenamiento permanente (como Red Hat® OpenShift® Data Foundation) evitan que las aplicaciones con estado experimenten fallas y pierdan todos los datos.
Almacenamiento en la nube privada
Consiste en el almacenamiento de datos entre conjuntos de recursos extraídos de aquellos diseñados exclusivamente para el usuario final, los cuales se suelen encontrar en su firewall y, en algunas ocasiones, en las instalaciones. Configurar manualmente una nube privada para toda una empresa suele ser menos eficiente a largo plazo que usar el software actual. Por eso, las empresas emplean plataformas como OpenStack® para convertir los grupos de recursos virtuales en nubes privadas y, de esta forma, llevar a cabo la transformación digital.
Almacenamiento en la nube híbrida
Consiste en almacenar datos en varios entornos de nube con cierto nivel de gestión, organización y portabilidad de las cargas de trabajo entre ellos.
Comments
Post a Comment